La nuez moscada es una especia muy aromática, con sabor cítrico, dulce y algo picante, por lo que debe emplearse con moderación. Combina a la perfección con diferentes tipos de cocidos, salsas, carnes, verduras y pescados, así como con otras especias como el clavo y la canela. En Sucesores de Ignacio López comercializamos la nuez moscada en grano en envases de 60 gramos, aunque también disponemos de nuez moscada molida en frascos de 320 gramos para satisfacer las necesidades de todo tipo de consumidores.
Este condimento, además de ofrecer un toque especial a cualquier tipo de plato, también destaca por sus propiedades medicinales. Así, ayuda a proteger el sistema cardiovascular, ya que mejora la circulación sanguínea, controla la presión arterial, es anticoagulante y previene la formación de trombos. Gracias a ello reduce el riesgo de sufrir enfermedades coronarias como los infartos o las anginas de pecho. La nuez moscada también tiene efectos antiinfalamatorios, que no sólo alivian la hinchazón de vientre, sino que también calman los dolores musculares y de las articulaciones. Su acción ligeramente sedante permite, al mismo tiempo, aliviar el dolor de las encías.
Asimismo, la nuez moscada destaca por sus propiedades antibacterianas, que combaten gérmenes y bacterias y protegen el organismo de un sinfín de enfermedades, sobre todo de la boca. En muchas culturas también se utiliza la combatir la depresión y la ansiedad, ya que sus efectos calmantes contribuyen a calmar los nervios, reducir el estrés y mejorar el sueño. Del mismo modo, activa el cerebro, ayudando a mejorar la concentración, es afrodisíaca y rejuvenecedora. Aplicada de manera externa junto con un aceite neutro, la nuez moscada ayuda a aliviar el dolor de las articulaciones y la inflamación y a eliminar las células muertas y limpiar los poros de exceso de grasa. Por este motivo es un buen tratamiento contra el acné.